“Existe más historia que geografía en una botella de vino” (J. Kressman)
Un Merlot para disfrutar de Casa Roca
Disfrutar de las cosas sencillas, es todo un arte. Disfrutar de la familia, con los amigos. Disfrutar, en definitiva de estar vivos.
Dalí escribió alguna vez, allá en Cadaqués, que el que sabe degustar no bebe demasiado vino, pero disfruta sus suaves secretos. Entonces, cómo aprender ese arte del disfrute de los detalles, el disfrute de una buena copa de vino, bebida con tranquilidad, junto a los que queremos. Pienso esto mientras degusto un Merlot 2015 de la viña Casa Rosa, un vino cuyos viñedos se encuentran a 1.250 metros de altura sobre el nivel del mar en la cordillera de Los Andes.
Pero qué sabemos de esta cepa. Sabemos que el Merlot pertenece a la misma familia que la Cabernet, que el nombre Merlot se traduce en español como Mirlo, y se cree que se le nombró así por al plumaje azul intenso de estas aves y por la preferencia de comerse el grano de la Merlot. Originaria de la región de Bordeaux al sudoeste de Francia, los vinos que se producen con esta variedad de uva son excelentes, se caracterizan por su finura y elegancia y por sus taninos grasos y aterciopelados. Acá en Chile, esta cepa es la segunda más plantada, por lo que tiene gran arraigo en nuestra cultura vitivinícola, siendo una de las cepas más solicitadas.
Pero vamos al Merlot que quiero recomendar hoy. Este vino, contiene un 97% de la cepa Merlot y un 3% de la Syrah, mezcla y detalle que consigue dar mayor complejidad en aromas, color y estructura. Con seis meses de barrica de segundo uso, este vino fue cosechado a mano y se seleccionaron sus granos, llegando a la cuba en las mejores condiciones para la fermentación. Una vez en esta, se le dejó en maceración prefermentativa cuatro días, consiguiendo así color y aromas, todo esto antes de iniciar el proceso fermentativo. El resulta es un Merlot de color rojo rubí, intenso, con tonos marrones, brillante y con una amplia gama en aromas, encontrando notas a vegetales como la betarraga, algo floral y aromas a frutos rojos como la cereza. Con una sutil madera, posee el equilibrio perfecto para apreciar todos los aromas propios de las cepas, ya que con tranquilidad, podemos distinguir la nota cárnica del Syrah. En boca, estructurado y denso, de taninos golosos y algo abocado. Por tener una acidez baja se puede percibir cuerpo sin que sea pesado. Un vino bien logrado. Recomiendo maridar este Merlot con carnes, puede ser pollo o carne de vacuno, ojalá bien sazonados. También pastas con una buena salsa.
En resumen, este Merlot de Casa Roca, es la mejor compañía para disfrutar de la vida, con tranquilidad y junto a la familia.
